jueves, 10 de enero de 2013

Los momentazos de nuestra vida.

Cada uno tenemos en nuestra vida momentos, instantes o como quieran llamarlo, que nos producen sensaciones únicas en nuestro interior, ya sean buenas o malas. Son sensaciones producidas en un segundo. ¿Qué sentiste cuando te dijeron por primera vez que te amaban? ¿Qué sentiste cuando tenías seis años y le preguntaste a tus compañeros sí podías jugar con ellos y te dijeron que si? A esos momentos me refiero.

Yo contaré algunos de esos casos que han ocurrido en mi vida. Por ejemplo, el segundo de emoción que sentí cuando Andrés Iniesta marcó el gol que le dio a España el campeonato del mundo por primera vez en la historia, era el minuto 115, quedaba poco para el final, y nuestra selección era la campeona del mundo. Un segundo de mala sensación es cuando me dieron la nota de un examen que tanto esperaba y suspendí. Son ejemplos de muchas cosas que ocurren dentro de nuestras vidas que son únicas y todavía más especiales si usted es una persona sincera, que se esfuerza por hacer las cosas bien y respeta a quien tiene a su alrededor.

No obstante, no solo quiero ir a parar a lo que ya ha vivido, sino a lo que espera vivir o a lo que Dios le ha llamado a vivir. Les pondré mi ejemplo. Yo estoy luchando por obtener una carrera universitaria y quiero vivir ese segundo en el que vaya a mi graduación final y digan mi nombre. Yo estoy poniendo en oración algunos de mis sueños y quiero vivir ese segundo en el que pueda contemplar como comienza su culminación. Pero, siempre hay un pero en cada uno de mis párrafos, hay un momento, el cual yo llamo momentazo, que va a ser el mejor de mi vida y es el que espero y anhelo vivir; no va a ser en La Tierra, no va a ser en este cuerpo humano. Creo que ya he dado demasiadas pistas como para que no lo hayan averiguado ya, pero lo diré. El momentazo más esperado. Cuando termine mi juicio final, se halle mi nombre en el libro de la vida, se diga en voz alta, aparezca Jesús, y con su sonrisa y sus brazos abiertos me diga: "Ven hijo mío". Lo he imaginado muchas veces y la mayoría termino quebrantado. ¿Cuál es el suyo?

Bendiciones. Antoinne.